Otra joyita. En un viaje de tren, entre el traqueteo y el sol de verano escondiéndose por los anchos campos de Castilla, diría que no le saqué todo el jugo que podría haberle sacado.
Esta película cuenta la realidad de tantos portugueses trabajadores instalados en Francia. Con un cariño y una alegría ibéricas, con la saudade que conocemos de los gallegos, y con el orgullo de hacer las cosas bien hechas, se nos deja entrever una esquinita de este gran país.
Quizá estemos demasiado acostumbrados a los colores, las luces, de las películas ambientadas en Italia. En esta película, todo el color y toda la luz ha traspasado fronteras para verse también en Francia.
No os cuento más por temor a estropearosla. Os dejo el trailer en español para abrir boca, pero de verdad que merece la pena verla: una de esas historias que te hacen volver a amar la vida.
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